Our Story

Josearth, better known as Josie, didn’t know her life was about to change the moment she started working at Southern Winds Hospital. On her first day, she was introduced to Dariel, who worked in a different department. Their first interaction was less than ordinary but entirely unforgettable. Josie noticed Dariel carrying a pack of Red Bulls and casually asked him for one. His reply? “I don’t even know your name.” Though it was a simple moment, Josie had already felt a spark.

A few days later, Dariel asked Josie if she wanted to grab lunch. Surprisingly, she said no—even though she was starving. Despite her initial hesitation, their conversations became more frequent, and their connection deepened. Over time, friendship blossomed into something more.

The turning point came when Josie invited Dariel to her friend’s birthday party. The night was full of laughter, drinks, and one unforgettable pool moment. Josie and her best friend jumped into the pool, convinced the water was warm, though everyone else insisted it was freezing. Dariel, watching from a distance, stood up, and for a second, everyone thought he was annoyed. But to their surprise, he returned moments later, changed into swim trunks, and jumped in with them. It was one of the first glimpses of his fun-loving and spontaneous nature—traits Josie would come to adore.

Soon after, Josie realized she was falling for him. A couple months later, Dariel asked her to be his girlfriend. Although fear of being hurt again held her back momentarily, Dariel showed her what true love and unwavering support looked like. He became her safe space, her biggest cheerleader, and the one who helped her see love in a new light.

As their relationship grew, so did their family. A year ago, they brought Luna, their lovable dog, into their lives. Luna quickly became the heart of their home, adding extra warmth and joy to their days. Whether it’s cozy cuddles or walks in the park, Luna’s playful energy has only strengthened the bond between them.

Fast forward four years, and Josie still marvels at the life they’ve built together. She never imagined herself getting married, but Dariel’s love changed that. Their journey has been filled with growth, laughter, and countless dreams coming true.

Now, they’re preparing for the next chapter of their lives as husband and wife—a testament to the love that began with a simple can of Red Bull, a leap of faith, and trust.

Nuestra Historia

Josearth, mejor conocida como Josie, no sabía que su vida iba a cambiar en el momento en que comenzó a trabajar en el Hospital Southern Winds. En su primer día, fue presentada a Dariel, quien trabajaba en otro departamento. Su primer encuentro fue menos que ordinario, pero completamente inolvidable. Josie notó que Dariel llevaba una pack de Red Bulls y, de manera casual, le pidió uno. ¿Su respuesta? “Ni siquiera sé tu nombre.” Aunque fue un momento sencillo, Josie ya sentía una chispa.

Pocos días después, Dariel invitó a Josie a almorzar. Sorprendentemente, ella dijo que no, aunque estaba muriendo de hambre. A pesar de su primera duda, sus conversaciones se hicieron más frecuentes y su conexión se fue profundizando. Con el tiempo, la amistad floreció en algo más.

El punto de inflexión llegó cuando Josie invitó a Dariel a la fiesta de cumpleaños de una amiga. La noche estuvo llena de risas, tragos y un momento inolvidable en la piscina. Josie y su mejor amiga saltaron al agua, convencidas de que estaba caliente, aunque todos los demás pensaban en que estaba helada. ( si estaba helada jaja) Dariel, observando desde lejos, se levantó, y por un momento, todos pensaron que estaba molesto. Pero para sorpresa de todos, regresó momentos después, cambiado en su ropa de baño, y saltó al agua con ellas. Fue uno de los primeros detalles de su naturaleza divertida y espontánea—características que Josie acabaría adorando.

Poco después, Josie se dio cuenta de que se estaba enamorando de él. Un mes después, Dariel le pidió que fuera su novia. Aunque el miedo a ser herida nuevamente la detuvo momentáneamente, Dariel le mostró lo que es el amor verdadero y el apoyo inquebrantable. Él se convirtió en su espacio seguro, su mayor animador, y el que la ayudó a ver el amor desde una nueva perspectiva.

A medida que su relación crecía, también lo hacía su familia. Hace un año, trajeron a Luna, su adorable perra, a sus vidas. Luna rápidamente se convirtió en el corazón de su hogar, añadiendo calor y alegría a sus días. Ya sea en acogedoras caricias o paseos por el parque, la energía juguetona de Luna solo ha fortalecido el vínculo entre ellos.

Cuatro años después, Josie sigue maravillándose de la vida que han construido juntos. Nunca imaginó que se casaría, pero el amor de Dariel cambió eso. Su viaje ha estado lleno de crecimiento, risas y sueños que se han hecho realidad.

Ahora, se están preparando para el siguiente capítulo de sus vidas como marido y mujer—un testimonio del amor que comenzó con una simple lata de Red Bull, un salto de fe y mucha confianza.